Renovado

El proceso de renovado de un neumático consiste en aplicar una nueva banda de rodamiento con las mismas condiciones que un neumático nuevo sobre la carcasa original, cuyas condiciones hayan sido verificadas óptimamente.

Cómo se lleva a cabo el proceso de renovado de un neumático

El renovado de los neumáticos es un proceso largo que requiere una serie de pasos que deben ser realizados con el máximo nivel de atención y precisión. Este generalmente implica sólo el cambio de los productos de goma del neumático, mientras que la estructura de la rueda queda intacta.

El primer paso es la inspección. Durante esta fase el neumático se verifica sobre una maquinaria adecuada, y aquí se evalúan los posible daños de la carcasa. Estos van a ser indicados de alguna manera para facilitar y agilizar las siguientes fases de la regeneración y rechazar los que no reúnan condiciones de seguridad. La inspección inicial es fundamental para el éxito del entero proceso de renovado.

Luego, con maquinaria no destructiva, se procede con el control de la parte interna de la carcasa, para comprobar que no hayan cortes, que la estructura en acero esté en perfectas condiciones y que esta no presente otros posibles daños. Los neumáticos que no superen este test no serán renovados, y serán directamente descartadas.

Sigue la fase de raspado, durante la cual se elimina toda la goma sobrante de la banda de rodamiento adherida a la carcasa. Este proceso se lleva a cabo con la ayuda de una maquinaria adecuada para el raspado que proporciona la correcta forma, medida y textura para garantizar una perfecta adherencia de la banda de rodamiento a la carretera.

El cuarto paso es el de la reparación y limpieza de los cráteres. Es decir que en esta fase se reparan y limpian todos los daños y las imperfecciones presentes en la carcasa, siempre y cuando los daños sean efectivamente reparables. Una reparación hecha según los parámetros de seguridad, garantiza que el neumático dure tanto como la banda de rodamiento que le ha sido aplicada. Llegado este punto, la superficie de la carcasa está lista para recibir una nueva banda de rodamiento y se puede proceder añadiendo sobre ella una solución que sirve para que la nueva banda de rodamiento quede colocada en la carcasa hasta su posterior vulcanización. Ya se puede aplicar la banda de rodamiento sobre la carcasa.

Una vez que la banda de rodamiento ha sido aplicada, la carcasa se somete al proceso de vulcanización, que se puede realizar en caliente (entre los 150° y los 160°) o en frío (alrededor de los 105º). Este proceso, siguiendo las oportunas condiciones de temperatura y de presión, permite vulcanizar la banda de rodamiento con la carcasa a las mismas condiciones que un neumático nuevo.

El proceso de renovado debe considerarse finalizado sólo luego de la inspección final. Durante este paso todos los neumáticos que hayan sido renovados son revisados detenidamente para asegurar que el producto está en perfectas condiciones de seguridad y que ofrece un rendimiento máximo.

Por qué elegir neumáticos renovados

Seguridad

El proceso de renovado es una actividad que se efectúa en conformidad con los más elevados estándares de seguridad con maquinaria de alta tecnología y operarios cualificados. Además, desde 2004 se hace obligatoria la homologación de los neumáticos renovados según los reglamentos ECE ONU 108 para vehículos de pasajeros y 109 para vehículos comerciales. Esto certifica que los neumáticos renovados son controlados con los mismo criterios que se usan para los neumáticos nuevos, y de esta manera circular con las mismas prestaciones y seguridad que los nuevos.

Economía

Los neumáticos renovados presentan las mismas calidades y performances que los neumáticos nuevos, la diferencia es que también ofrecen grandes ventajas en términos monetarios. Estamos hablando de un 30% - 50% menos en comparación con un neumático nuevo, con las mismas prestaciones. Las razones por las cuales se verifican daños prematuros son la presión (muy baja o muy alta), la sobrecarga de los neumáticos, y la alta velocidad, tanto que se trate de un neumático nuevo como de uno renovado. Por este motivo es imprescindible el correcto mantenimiento de los neumáticos.

Un neumático renovado es más económico simplemente porque su coste no incluye los costes de fabricación de la carcasa, que es la parte que influye mayormente en el precio final del neumático. La banda de rodamiento sólo representa una pequeña parte del coste del neumático.

Hay que tener en cuenta que los productores de neumáticos para camión, producen por lo general sus neumáticos con el fin de poderlos regenerar, por tanto estos están diseñados para poder ser regenerados.

Ecosostenibilidad

El renovado es una actividad altamente sostenible y debería ser considerada entre las mejores prácticas de reciclaje de neumáticos usados. A diferencia de otros métodos de reciclaje, no se limita simplemente a prolongar la vida del neumático, sino que también contribuye de forma activa a reducir el número de neumáticos que se producen cada año, lo que nos permite ahorrar un cuantioso número de recursos naturales, como petróleo y acero, limitando también la emisión de partículas nocivas y CO2 (gases de efecto invernadero). El renovado de un neumático de automóvil nos permite ahorrar 20 litros de petróleo; por lo que se refiere al renovado de uno de camion, el ahorro es de 68 litros de petróleo. Más en concreto, para producir un neumático de camión mediano se necesitan 100 litros de petróleo, mientras que son suficiente 32 para su renovado.

Un neumático puede ser renovado varias veces, y una vez que se haya alcanzado el número máximo de regeneraciones, toda la materia prima que ha sido utilizada para su producción (o su renovación) puede ser utilizada nuevamente para otras formas de reciclado.